2107 d.C. deciembre 26

San Esteban, Diácono y Mártir

Colectas

Te damos gracias, oh Señor de la gloria, por el ejemplo del protomártir Esteban, quien, mirando hacia el cielo, intercedió por sus perseguidores ante tu Hijo Jesucristo, que está a tu diestra; donde vive y reina contigo y el Espíritu Santo, un solo Dios, en gloria eterna. Amén.

Lecciones

Leccionario Común Revisado — Año B

Leccionario del Oficio Diario — Año Dos

Oración Matutina
Oración Vespertina

Prefacios

Porque nos diste a Jesucristo, tu único Hijo, que se encarnó por nosotros; quien, por el gran poder del Espíritu Santo, fue hecho Hombre perfecto, nacido de la carne de la Virgen María su madre; para que, librados del yugo del pecado, recibamos la potestad de llegar a ser hijos tuyos.

Colores litúrgicos

Rojo

Referencias

El Segundo Día de Navidad

Colectas

Te damos gracias, oh Señor de la gloria, por el ejemplo del protomártir Esteban, quien, mirando hacia el cielo, intercedió por sus perseguidores ante tu Hijo Jesucristo, que está a tu diestra; donde vive y reina contigo y el Espíritu Santo, un solo Dios, en gloria eterna. Amén.

Lecciones

Leccionario Común Revisado — Año B

Leccionario del Oficio Diario — Año Dos

Oración Matutina
Oración Vespertina

Prefacios

Porque nos diste a Jesucristo, tu único Hijo, que se encarnó por nosotros; quien, por el gran poder del Espíritu Santo, fue hecho Hombre perfecto, nacido de la carne de la Virgen María su madre; para que, librados del yugo del pecado, recibamos la potestad de llegar a ser hijos tuyos.

Colores litúrgicos

Blanco o dorado

Víspera de San Juan

Colectas

Derrama, oh Señor, sobre tu Iglesia el resplandor de tu luz, para que, iluminados por la enseñanza de tu apóstol y evangelista Juan, andemos en la luz de tu verdad de tal manera que al fin alcancemos la plenitud de la vida eterna; por Jesucristo nuestro Señor, que vive y reina contigo y el Espíritu Santo, un solo Dios, por los siglos de los siglos. Amén.

Lecciones

Leccionario del Oficio Diario — Año Dos

Oración Vespertina

Prefacios

Porque nos diste a Jesucristo, tu único Hijo, que se encarnó por nosotros; quien, por el gran poder del Espíritu Santo, fue hecho Hombre perfecto, nacido de la carne de la Virgen María su madre; para que, librados del yugo del pecado, recibamos la potestad de llegar a ser hijos tuyos.

Colores litúrgicos

Blanco o dorado