1987 d.C. noviembre 4

El Miércoles en la Vigésimo Primera Semana después de Pentecostés

Propio 26

Colectas

Dios de poder y piedad, sólo de ti mana el don que hace posible que tu pueblo fiel te sirva sincera y laudablemente: Concédenos que, para lograr el premio de tus promesas celestiales, podamos correr sin tropiezos; por Jesucristo nuestro Señor, que vive y reina contigo y el Espíritu Santo, un solo Dios, ahora y por siempre. Amén.

Lecciones

Leccionario del Oficio Diario — Año Uno

Oración Matutina
Oración Vespertina

Colores litúrgicos

Verde