1966 d.C. mayo 22

Séptimo Domingo de Pascua

Colectas

Oh Dios, Rey de la gloria, que con gran triunfo exaltaste a tu único Hijo Jesucristo a tu reino celestial: No nos dejes desconsolados, mas envíanos tu Espíritu Santo para fortalecernos y exaltarnos al mismo lugar, adonde nuestro Salvador Cristo nos ha precedido; quien vive y reina contigo y el Espíritu Santo, un solo Dios, en gloria eterna. Amén.

Lecciones

Leccionario Común Revisado — Año A

Leccionario del Oficio Diario — Año Dos

Oración Matutina
Oración Vespertina
Otros leccionarios

Leccionario de 1979 — Año A

Prefacios

Por tu Hijo amado, nuestro Señor Jesucristo. Después de su gloriosa resurrección, se apareció abiertamente a sus discípulos, y ante sus ojos ascendió a los cielos, a fin de prepararnos un lugar; para que allí donde él se encuentra, estemos también nosotros, y reinemos con el en gloria.

Colores litúrgicos

Blanco o dorado