1950 d.C. abril 11
Martes de Pascua
Colectas
Oh Dios, que por la gloriosa resurrección de tu Hijo Jesucristo destruiste la muerte y nos alumbraste con vida e inmortalidad: Concede a los que hemos resucitado con él, que habitemos en su presencia, y nos gocemos en la esperanza de la gloria eterna; por Jesucristo nuestro Señor, a quien contigo y el Espíritu Santo, sea el dominio y la alabanza, por los siglos de los siglos. Amén.
Lecciones
Leccionario Común Revisado — Año C
Leccionario del Oficio Diario — Año Dos
Oración Matutina
Oración Vespertina
- Salmo 111; 114
- Isaías 30:18–21 (opcional)
- I Corintios 15:12–28
Leccionario de 1979 — Año C
Prefacios
Pero principalmente tenemos que alabarte por la gloriosa resurrección de tu Hijo nuestro Señor Jesucristo; pues él es el verdadero Cordero Pascual, quien fue sacrificado por nosotros, y ha quitado los pecados del mundo. Por su muerte ha destruido la muerte, y por su resurrección a la vida, ha conquistado para nosotros la vida eterna.
Colores litúrgicos
Blanco o dorado
Jorge Augusto Selwyn, Primer Obispo Misionero de Nueva Zelandia y de Lichfield, 1878
Colores litúrgicos
Blanco o dorado