2010 d.C. noviembre 7
Vigésimo Cuarto Domingo después de Pentecostés
Propio 27
Aclamaciones
Celebrante: Bendito sea Dios: Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Pueblo: Y bendito sea su reino, ahora y por siempre. Amén.
Colectas
Oh Dios, cuyo Hijo bendito vino al mundo para destruir las obras del demonio y hacernos hijos de Dios y herederos de la vida eterna: Concede que, teniendo esta esperanza, nos purifiquemos como Él que es puro; para que, cuando vuelva con poder y gran gloria, seamos transformados como Él en su reino eterno y glorioso; donde vive y reina contigo y el Espíritu Santo, un solo Dios, por los siglos de los siglos. Amén.
Prefacios
Por Jesucristo nuestro Señor, que el primer día de la semana venció a la muerte y al sepulcro, y por su gloriosa resurrección nos abrió el camino de la vida eterna.
Colores litúrgicos
Verde
Willibrord, Arzobispo de Utrecht y Misionero a Frisia, 739
Colores litúrgicos
Blanco o dorado